pasión de perdices

Disculpen mi semana anterior. Un asco. En fin, trataré de irme poniendo al día, que me intimidan ustedes con lo prolíficos que están.

El miércoles por la mañana, a las 8.05 a.m. se subía al mismo autobús en el que yo, con harto dolor de mi corazón, me arrancaba las legañas una pareja de jóvenes de no más de trece años. Percátense de la edad. El caso es que una vez lograron ubicarse entre los cien pasajeros que muy amablemente nos rozábamos dentro del aparato (esto es, a unos dos centímetros de mí), comenzaron a comerse la hociquera con una fruición digna de los caimanes de Cleopatra. Hasta ahí todo más o menos normal (los vapores de la adolescencia, el Carpe Díem en cada beso que pudieran arrancarse, las voces cacareantes, las incipientes perillas rayando al sol...), pero la cosa empezó a ponerse un pelín tensa cuando, en pleno desenfreno, el chavalito (ni tan siquiera un poco barbilampiño: todo granos, el campeón) empezó a refrotarse contra el corpachón de la muchacha presionándola contra las barras de seguridad a modo de sandwichito caliente. La señora de mi lado no paraba de suspirar rotundos "por-fa-vor-un-poco-de-de-cen-cia" mientras un grupúsculo de pubescentes atendía maravillado (juraría que hasta tomaban notas) de cómo el chiquillo, con un virtuosismo del que yo carecía a su edad, desaparecía ambas manos por entre las carnes de la gozante mozalbeta. Veinte minutos de reloj dale que dale. Ahí queda eso. De 8.05 a 8.25. Hasta empañaron las ventanillas. Y, eso sí, estoy más que convencido de que el niño llegó a clase con un íntimo, ronroneante y malévolo dolor testicular.

4 comentarios:

Miss Kubelik dijo...

:D Son cosas de la edad, no nos pongamos moralistas, abueloooo

Pd. Ya se le echaba en falta ^_^

Gloria dijo...

Pues que disfruten, qué coño, tantatontería. Lo malo es que luego ella no podrá ir contando lo bien que se lo monta con su pavo, porque la tacharán de zorra. endevé.

José Moya dijo...

Sobre esto último el autor del blog tiene una anécdota que ha contado a sus íntimos...

juank sinclair fantoba dijo...

Me acabo de poner nervioso...